lunes, 17 de septiembre de 2012

FESTIBIKE 2012 LARGA (64KM)

 Esta ruta por varios motivos ha sido especial para mí desde un principio. Por un lado el año pasado por estas fechas empecé a salir con la bici con un poco de asiduidad y saciaba parte de mi sed de información con la revista BIKE. El primer número que compré de la revista venía con un reportaje sobre el Festibike 2011 que me hizo fantasear en como sería una marcha de este tipo.
 Por otro lado pese a las ganas de correrla, el hecho de que coincidiera en fecha con un evento importante del trabajo me hizo perder la esperanza de hacerla justo un año después. Pero inesperadamente 4 días antes me encuentro que voy a poder ir, eso si, después de un verano de sequía y 15 días de trabajo realmente duros no eran la mejor manera de preparar una marcha de 64km y 1100mts de desnivel acumulado.
 Qué ilusión!!! Puedo ir al Festibike y encima lo hago invitado gracias a un concurso de la Ruta de los Vinos.

 El sábado me acerco a Las Rozas para recoger el dorsal y visitar la expo, pero esto lo contaré en otra entrada del blog. Unas amables señoritas me dan el dorsal y los regalitos que vendrán muy bien. Siento calambres en los gemelos de llevar tantos días de trabajo acumulado, así que voy estirando de vez en cuando, me hidrato y como algo sano, amburguesaza BigKing XXL entre pecho y espalda. Eso si, para cenar un poco de pasta.

 El domingo no tengo que madrugar, me levanto tranquilamente ya que tengo todo cargado, desayuno unas tostadas y dejo a la mona en casa de los abuelos. En poco más de 20 minutos me planto en el parking donde ya hay cientos de coches con bicis, gente calentando por todos los lados y ya me empiezan a entrar las prisas por ponerme delante en la salida. Me cambio, monto la rueda y echo algo más de cera en la cadena.



 Pienso en calentar un poco antes de la salida, pero según me acerco al arco veo que ya hay muchísima gente que se ha adelantado. Falta media hora para la salida y habría más de 150 ciclistas con sus monturas ya preparados. Mi idea es simplemente salir lo más adelante posible para ir con menos gente en la famosa subida del "Río Chico" y una vez arriba relajarme y acabar con el ritmo que me pidan las piernas. La sorpresa me la llevo al ver a Félix y Alberto que deben haber llegado un pelo antes que yo. Hoy no salimos en la foto!!




Pues al final resulta que si que salimos gracias a que el gran Carrascosa hizo fotos no solo a los que salieron en primera fila. En esta foto andamos los 3 Dónde está Wally??



 Los más de 1200 participantes llenan por completo la recta de salida e incluso sigue la cola hasta más allá de la puerta de la Feria.
 Con la charlita que nos traemos, ya que hace tiempo que no coincidíamos y las explicaciones del speaker se nos pasa el tiempo volando y consigo poner el cronómetro en marcha justo para la salida. Salimos muy despacio y empezamos la ruta por el asfalto de la urbanización, en la que tal cantidad de gente me hacía pensar en el lío que se iba a montar en la primera subida. Además la rapided por la cuesta abajo por un lado viene bien para calentar, pero por otro habrá que hacerlo al final de la marcha de subida y eso me hace menos gracia.
 No hace falta llegar a las primeras rampas para que se líe por la gente, ya que en un tramo que debía de ser bastante entretenido hasta llegar al río, hay gente que lo de la técnica no lo lleva muy bien y se bajan de la bici en sitios realmente fáciles. En este tramo adelanto a bastante gente hasta que pronto empieza a subir el desnivel del camino y se ponen a mi lado Félix y Carcoma. En la primera parte que la subida es durilla pero dentro de lo normal, adelantamos a bastante gente. Félix tira fuerte y cada vez es más difícil adelantar, ya que el camino solo tiene un paso bueno y lo demás es piedra suelta imposible. Iba tan concentrado en buscar un sitio entre tal marabunta de gente que no me doy cuenta de que ya la cosa se pone dura de verdad y al ir a poner el plato pequeño se me sale la cadena en plena pared. Ñññññ  En lo poco que tardo en colocarla me habrán adelantado 15 tíos y he perdido la rueda de los Hermanos Sevillanos. Me lo tomo con paciencia y dejo lo de hacer el "Río Chico" sin bajarme de la bici para otro día con menos gente. A ese ritmo no se me hace especialmente dura la subida, además hay que guardar fuerzas que quedan muchos kilómetros todavía.
El resto de subida son tramos o duros o durísimos, en los que mantengo Félix y Carcoma a la vista pero muy lejos para llegar a ellos. Por fin dejamos de subir, llegamos a Colmenarejo y algo después hay un pequeño tramo de sendero con alguna piedra en bajada divertido, que lleva a una pequeña subida donde está el primer avituallamiento sobre el kilómetro 18. Allí estaban los chicos de azul haciéndose fotos, en las que me cuelo con todo el morro. Relleno el bote de isotónica, un par de trozos de naranja y medio plátano para mis piernas.



 Primera zona de bajada que nos había marcado la organización como técnica y peligrosa. La verdad es que vamos en fila de a uno y bastante tenemos con no comernos a los que van delante algo más precavidos, a ese paso creo que no me darán los frenos... Las bajadas siempre duran menos de lo que nos gustaría y cuando nos queremos dar cuenta estamos llaneando a la altura del Aeródromo de Villanueva del Pardillo. Carcoma iba delante unos metros y Félix tira y me dice que vayamos para delante, pero se que hoy no es día de alegrías y prefiero rodar a un ritmo cómodo. Me hierve la sangre viendo como me adelanta gente, pero se que es lo mejor para mi. Ya no los vería hasta casi acabar la ruta.
 La zona es bastante pistera y llegamos rápido a Villanueva de la Cañada, donde cruzamos la carretera por un sitio un poco mal regulado por el policía y se hace peligroso. Pasamos por una especie de parque y cogemos dirección a la montaña de nuevo por una zona rápida con un sendero en el que adelanto a un chavalillo de unos 13 años que iba genial (ole por las nuevas generaciones). Cogemos de nuevo un camino que nos lleva a los píes de la segunda prueba para nuestras piernas, una subida que han apodado como "el Mortirolo". Ya desde abajo da mucho miedo ver por donde van los de delante de altura que han cogido en tan poco tiempo. Apenas hemos empezado a subir y ya voy con casi todo el desarrollo. Unas subidas con el camino malo pero mucho mejor que en la primera, en la que te tienes que preocupar de no caerte de lo despacio que se sube. En estos momentos por primera vez me arrepiento de llevar las ruedas de 29" debajo. Como anécdota me pasa un chico que superaba seguro los 100kg y no muy alto. Hay que tener muchas piernas para subir ese peso por un desnivel así. Yo llevo de referencia a un par de chicos que veo que van parecidos a mí y no me cebo para nada. Prefiero apretar luego si es que tengo fuerzas. El chico de antes pagó el esfuerzo y poco antes de coronar se tuvo que parar a un lado.



Las rampas se suavizan y tomamos camino a Valdemorillo. Antes de llegar escucho un ruido familiar y me doy cuenta que es que pasamos al lado del circuito de motocross donde debe haber gente rodando. El segundo avituallamiento sobre el kilómetro 38 me sirve para soltar un poco las piernas, volver a llenar el bote y un par de piezas de fruta también. Dejamos el pueblo a la izquierda y empieza una nueva bajada. Esta vez con menos gente y puedo tirarme a saco adelantando a bastante gente, a algunos que no tardarían mucho en volver a pasarme, ya que cuando te quieres dar cuenta ya hay que empezar a subir otra vez.
 La tercera gran pared del día no tiene esos rampones imposibles de la primera, ni siquiera parecidos a los de la segunda, pero los kilómetros acumulados se notan y sigo abusando de desarrollos que me hacen ir lento pero suelto. Empiezo a pensar que voy a ser capaz de acabar la marcha sin que me den mis habituales calambres y además sigo casi con la misma gente desde hace muchos kilómetros. Ya en esta parte se empieza a ver a mucha gente parada en los laterales o incluso cayendo de la bici por los calambres. Hay un sol de justicia y el que se haya pasado de sus posibilidades lo va a pasar mal.
 Después de llegar a la parte más alta de esta subida hay un tramo más llano, giramos a la derecha y nos encontramos con una parte conocida, ya que pasamos por ahí justo antes del primer avituallamiento. Así que de nuevo hacemos la zona con una trialera fácil de bajada que nos lleva a la pequeña subida antes del último repostaje, que sería en el mismo lugar que se hizo el primero.



 Esta vez además de lo de antes me tomo un gel, que seguro que viene bien para acabar y aunque en el puesto nos dicen que ya todo es bajada, a mí algo me dice que no es así. Esta bajada para mí la mejor de todas, cogemos el camino esta vez por la izquierda y antes del tramo más técnico me paro a saludar a un miembro de Last Lap con el que estuvimos el día de la previa del Vino Tinto. La bajada después se hace muy rápida y divertida, incluso con algún salto gracioso. Adelanto a varios de nuevo bajando y otra vez se ha acabado... Con lo que cuesta subir!!!!!
 Como bajamos animados y ya lo que queda es "bajada" hay gente que aprieta en las primeras subidas que cogemos. Pues aquí empiezan los "cadáveres" como dice Carcoma, mucha gente abusa de plato y se quedan en esa zona de falso llano por las cunetas. A mí me da un amago de calambre y bajo desarrollo para dejar respirar el músculo, así que lo contengo y no vuelvo a intentar apretar más de lo que puedo.
 Kilómetro 58 y una zona de bajada que nos lleva a cruzar el río. Qué gusto el agua fresca! Pasamos por la zona del pinar junto a río que lleva al merendero donde hay bastante gente animando y por fin algo de sombra. Ya en el merendero al chico que va delante mía se le pincha la bici al pasar un puente de madera y el de detrás dice que qué mala suerte a 2 kilómetros de acabar, pero a mí no me salen las cuentas. Llevamos 60 y nos queda subir a Las Rozas. Justo! Nada más salir del merendero ya todo es subida y es que lo que baja tiene que subir... es norma en el ciclismo con bicis de menos de 15 kilos. A tan poco del final me da lástima ver a tanta gente que se va quedando por el camino parando por los calambres y es que la ruta se está haciendo muy dura.
 El tramo final de asfalto lo hago sintiendo que no me queda de donde sacar fuerzas, ya he agotado el aporte del desayuno, la manzana, las dos naranjas, tres plátanos, un gel y 4 litros de isotónica y agua. Durante la subida me adelantan 5 ó 6, pero ya paso de liarla a tan poco de acabar. Por fin llego a Heron City y de ahí ya es todo llano hasta meta. Me queda un kilómetro y no me puedo creer ver a Félix en la bici al lado de Carcoma que está en el suelo con la "pájara de la muerte" Yo pensaba que estarían ya en casa con el ritmo que llevaba. Esperamos a que se repusiera y ya saca fuerzas de subir a la bici y hacer los últimos metros. Al final terminamos entrando juntos como empezamos y los tres de la mano... Si, Félix fue el valiente de entrar sin manos.

 Misión cumplida!! He acabado la marcha en la que peor estaba físicamente con diferencia sin calambres en un tiempo de 3:47, mejor de las 4 horas que había calculado. Según mis datos al final 66 kilómetros y 1100 metros de acumulado.

 Nos se si el trabajo me dejará entrenar este mes, pero seguro que en octubre voy a estar en La Ruta Imperial para acabar el año ciclista y espero poder hacer la de 70km en buenas condiciones.

Nos vemos por los caminos!!