lunes, 11 de mayo de 2015

YOSITRI! TRIATLÓN POPULAR DE MADRID 2015

Hola bloggeros globeros del mundo! Hace ya unos cuantos meses que no escribía una entrada en el blog y ya era hora...

El caso es que el año se presentaba prometedor, con la satisfacción de correr esta temporada en el equipo de la tienda de Illescas Bikes401, oportunidad que me daba Tomás de formar parte de un grupo lleno de buena gente y grandísimos atletas como se está viendo fin de semana tras fin de semana, con podiums y victorias en cada prueba. El caso es que el trabajo no me ha permitido por distintos motivos el poder prepararme, incluso he pasado varios meses trabajando todos los fines de semana, con la falta de motivación que crea el saber que no puedes competir.



Pero como la cabra tira al monte y parado no he estado, ya que por lo menos he podido ir más al gimnasio haciendo entrenamiento funcional y nadando, era cuestión de tiempo el que apareciera una prueba que me diera la motivación para volver a correr.
El que se apuntaran varios compañeros del gimnasio a este evento fue el detonante, ya que uno ante todo es un envidioso y un "picao". Lástima que al final la persona que nos ha metido el gusanillo a los demás no ha podido correr por una lesión en la rodilla, que seguro no la privará de volver a pisar lo más alto del podio en más ocasiones como ya lo ha hecho antes.
La virgen que charlas soy!!!

Pues me inscribo con 3 semanas para prepararme la prueba y una base lejos de lo ideal. Ya había corrido un triatlón hace 2 años y mi punto flojo fue la natación, pero en este caso llevaba varios meses nadando una o dos veces por semana. Por contra la bici completamente olvidada, poco más de 500km llevo hechos este año, unidos a poder salir poco o nada, me hace tener que conformarme con alguna salida esporádica con la bici de montaña y un par de días de rodillo a la semana. El correr todavía peor, ya que tras la lesión de rodilla de hace un año estaba fortaleciendo musculatura en el gimnasio, pero correr correr, lo que se dice correr... pues unos 10 minutos en cinta a la semana, que fui aumentando hasta salir a correr a la calle 5km una semana antes de la prueba. Pero vamos que yo me sentía muy motivado y sabiendo que aunque no iba a marcar buenos registros por lo menos podría acabarlo con dignidad, o eso creía yo...

El 9 de mayo es el día D, a las 11:32 se daría de salida de nuestra tanda, con lo que no hay que madrugar y además haría mejor temperatura, ya que aunque tenía el neopreno a mano, gracias a mi amigo Guille, al final no se usaría.
Me acompañan mi nena y mi hermana que me ayudan a transportar toda la parafernalia que conlleva un triatlón y como no, se encargarían de animarme durante toda la prueba y harían las fotos que acompañan esta entrada.

Llama la atención el ambientazo que hay, con muchísima gente, nada menos que 1800 inscritos en las distintas categorías, para un neófito estéticamente todo muy bien montado, con unos boxes ordenados, la zona de carpas, meta e incluso castillos hinchables para los niños.
Me sorprende no encontrar nada de cola para recoger los dorsales, aunque para meter la bici en los boxes si tardamos un rato más, pero se entiende por temas de seguridad.






Me encuentro a unos amigos del club de Triatlón de Griñón y cuando nos queremos dar cuenta ya nos toca prepararnos para la salida. Aun sabiendo que en el triatlón anterior lo pasé mal por no haber calentado en el agua antes, esta vez me pasa lo mismo. Caliento bien en tierra y me mojo en el muelle antes de salir pero no era suficiente.




POOOOOOO Suena la bocina electrónica a las 11:32 en punto y el grupo de 90 que salíamos en esa tanda nos tiramos al agua para hacer los 750 metros que era más o menos una vuelta completa al lago de la Casa de Campo.
Al tirarme al agua me da una mala sensación que me acompaña durante muchos metros. No soy capaz de respirar normalmente como hago en piscina y no encuentro el ritmo para nada.  Llegando a la primera boya cada vez peor y tengo que parar incluso por unos segundos. Me calmo bajo un poco el ritmo y cada vez voy un poco mejor, hasta llegar a al última boya que me empiezo a sentir bien y ya puedo tirar a mi ritmo, adelantando en los últimos 200metros a bastante gente, incluso de la tanda que había salido antes que nosotros. Al final algo más de 16 minutos en el agua.



Salimos del agua y tras la ducha de rigor bajo la carpa nos dirigimos por el largo carril de moqueta hasta los boxes. Menos mal que mi bici no tiene pérdida y la encuentro sin problemas. Como mi bici no lleva automáticos me calzo las zapatillas de correr directamente y al ponerme la derecha me da un calambre gordísimo en el gemelo... Mal empezamos!!!!


  La bici es lo mío así que que puede ir mal? Pues nada más empezar en la pequeña subida a las pistas de tenis las zapatillas se me enganchan en los pedales, de tal manera que me tengo que bajar de la bici para colocar todo.
Una vez con la posición cogida ya me concentro en tirar lo que pueda sin pasarme... esto es relativo porque acabo viendo el pulsómetro al 91% y de ahí no se movía. Doy las tres vueltas casi clavadas, aunque los últimos 2 kilómetros intento soltar un poco las piernas que llevaba los cuadriceps ya un poco apretadillos y el gemelo del tirón molestando todo el rato. 47 minutos de bici al final.

Última transición, cuelgo la bici, me quito el casco y salgo intentando correr... El tirón del gemelo ahora lo tengo en las dos piernas completas. Aun así soy capaz de mantenerme corriendo e incluso pasar a alguno que iba peor que yo todavía. Paso los dos primeros kilómetros con muchos tirones y a duras penas puedo correr entre 4:30 y 5:00, que en  ocasiones es algo más lento todavía. Pero tras el giro de la última vuelta cada vez estoy mejor y puedo ir más rápido, mejorando mis tiempos en los dos últimos kilómetros y sobre todo las sensaciones. Aun así la carrera a pie es con diferencia lo que peor he sacado con 24 minutos para este sector.


Entro en meta con una gran satisfacción y con las alas que me da mi niña animando desde las vallas.
Habiendo sufrido por momentos, incluso te planteas la necesidad de hacer estas pruebas, pero no has entrado en meta y ya estás con la cabeza en la siguiente, pensando en que has de mejorar y los fallos que has podido tener.
Aunque el resultado no es para tirar cohetes el objetivo de acabar dándolo todo se ha cumplido de nuevo y no veo la hora de volver a ponerme detrás de una línea de salida, ya sea para empezar nadando otra vez, o corriendo en un duatlón o en una prueba ciclista.

Un saludo a todos y nos vemos disfrutando del sufrimiento!!!!