jueves, 14 de noviembre de 2013

1er Enduro MTB Trujillo 2013


Este año 2013 está siendo de lo más variado y entretenido, empezamos con poco tiempo para dedicarle a la bici pero al final además de volver a hacer alguna de las marchas que más nos gustaron el año pasado, hemos acabado haciendo duatlón, triatlón este verano y para terminar el año hemos disfrutado con una cuenta pendiente que teníamos... El Enduro!!!

Un par de meses antes del fin de semana de la carrera vemos en ForoMTB que se anuncia un nuevo circuito de enduro en Extremadura compuesto de 3 pruebas y pensado para todos los públicos, sin pretensiones de una gran carrera hecha con muchos medios, pero si con muchas ganas e ilusión. Con esta carta de presentación no perdimos un minuto y el mismo día de la apertura de inscripciones nos apuntamos de Bike Griñón: Guijarro, Pistón y yo mismo. Poco más tarde se uniría Dani de Serranillos que no se quería perder lo que sería el estreno de todos en esto de correr un Enduro. Y es que aunque los 4 somos de los que nos gusta más andar haciendo el moñas cuando salimos y siempre que podemos tiramos para la sierra, por desgracia esto lo hacemos mucho menos de lo que nos gustaría.

La carrera sería los días 9 y 10 de noviembre y se pudo disfrutar de un fin de semana con un tiempo perfecto, pero a la vez las lluvias de la semana anterior y la humedad matutina hacían que el terreno se encontrara en un estado perfecto, con un agarre espectacular en las zonas de tierra y no tanto en alguna piedra que resbalaba bastante a primera hora.

El sábado por la mañana sin muchas prisas Javi, Sergio y Dani ponen rumbo a Trujillo para poder entrenar los tramos que habían preparado los chicos del club CSR a Dos Ruedas, además de dormir allí mismo evitando el madrugón que me tuve que meter yo, ya que el sábado trabajaba hasta tarde. Así que tuve que dejar la bici preparada el viernes y acechar a los chicos que estaban allí por wassup para saber como eran los tramos y tener la mayor información posible.
Los problemas mecánicos empezaban a aparecer y la cadena de Guijar dice basta subiendo de la T2, así que rápido en el grupo buscamos una y la echamos a la furgo para colocarla por la mañana.

"Sonido de Arpa"... Ufff suena el despertador el domingo a las 05:00 de la mañana y me levanto como un resorte. Desayuno mis tostadas de Nutella habituales de las marchas más duras y me acerco al garaje a cargar la bici y el bolsón de la ropa en la furgo del curro, que me iba a venir de lujo. El viaje se me pasa rápido pensando en como será todo y si los tramos serían tan complicados como me habían contado los chicos por teléfono. Cuando me quiero dar cuenta asoma el sol por la izquierda y al fondo la silueta del castillo me dice que he llegado a mi destino.



No sin dar un par de vueltas llego a la pensión donde habían dormido los chicos; desayunan, intentamos poner la cadena, se preparan para dejar la habitación y yo me cago un poco en ellos porque son casi las 09:00 y no hemos arrancado. Echamos las bicis a la furgo y subimos hacia el castillo, aparcando arriba mismo y muy cerca del epicentro de evento.


Nos terminamos de vestir de Tortuga Ninja, y lo primero es formalizar las inscripciones en la carpa de la organización, donde nos dan el dorsal y la pegatina con los tiempos a tener en cuenta para la salida de cada uno de los tramos. Tendremos que sincronizar los relojes con los de la organización para evitar disgustos.


Por fin voy a poder rodar en el circuito!! A las 10:00 es el briefing así que vamos muy justos para poder entrenar los dos tramos, subimos a la parte alta desde donde se dará la salida en carrera y nos tiramos en fila con Guijarro en primer lugar. Nada más salir bajamos por lo que en su día serían unas escaleras, pero ahora hay una rampa de tierra que acaba en un escalón y un giro de 180º que nos lleva a salir por un arco a la parte trasera del castillo donde se divide el camino para elegir el tramo que corresponda. Empezamos por el T1 que tiene una primera curva contraperaltada rápida y divertida en la hierba que nos deja en un callejón estrecho donde está la primera sorpresa... El callejón está cortado por dos vallas de obra que las puedes rodear o saltar por una piedra que hay a la izquierda, cuando llegamos Javi frena un poco y al estar húmeda la piedra resbala dejándose medio dedo en la pared. Yo que iba pegado a él me pasa parecido y también me caigo, pero por suerte sin consecuencias. No hemos empezado y ya estamos partidos de risa, aunque Guijar no tanto :P Desde ese punto me pongo delante que estoy emocionado y en vez de hacer los tramos despacio reconociendo el terreno, lo iba a hacer a tope a ver si con suerte me daba tiempo a hacer los dos tramos. Después de esta primera piedra en el camino volvemos a ver la calle cortada por vallas y nos obligan a ir por las piedras del lado izquierdo de la calle. Esta vez mucho más fáciles de sortear pero muy divertidas. Acaban con un giro a la izquierda y un pequeño escalón que nos deja en la acera. Aquí tenemos que apretar un poco para llegar a otra zona de piedra más larga con inercia, ya que entramos subiendo y acaba bajando con varios escalones cada vez más grandes pero todavía fáciles. Los muros de piedra se abren para llegar a una placita que bordeamos y nos abrimos un poco para afrontar el primer tramo de escaleras algo más corto, pero que nos deja con una casa delante, con lo que hay que bajar con más cuidado para entrar en la curva sin problemas. Una pequeña recta giro a derechas rápido y el segundo tramo de escaleras mucho más largo pero que al terminar en otra placita lo podemos hacer a tope sin problemas. Apretamos los dientes y vamos durante unos cientos de metros por las preciosas calles de la zona monumental de la ciudad entre muros de piedra, arcos de medio punto y puertas de madera de una época en la que a la bici la quedaban siglos para ser inventada. Salimos de la muralla por un arco que nos lleva a un estrecho y rápido sendero de tierra húmeda marcado en la hierba por el que nos tiramos sin contemplaciones. Siempre con la referencia de la muralla a nuestra izquierda entramos por un paso muy estrecho en el que toco con el puño izquierdo sin consecuencias y empezamos a subir poco a poco hasta que llegamos a una tramo de piedras en subida que aunque se puede hacer subido me parece más rápido bajarse de la bici. De nuevo cruzamos la zona de la muralla tras una cerrada curva a izquierdas y tras otro tramo de sendero rápido tenemos el primer gran escalón, que como en todos los demás optaría por la escapatoria lenta. A partir de este momento nos ponemos rumbo a Huertas de la Magdalena  por una rapidísima calleja de hormigón seguida de unos primeros cientos de metros de camino bastante rápido con alguna sorpresa en forma de tramos de piedra que nos obliga a estar atentos.
El camino se acaba y empieza lo divertido, ya que hasta el fin del tramo lo que resta es un sendero muy estrecho que desaparece en grandes zonas de piedra donde los chicos de la organización nos han preparado unos pasos preciosos, la mayoría muy rápidos, aunque en ocasiones a mi me ponen un poco tenso y ya empiezo a oír quejarse a la pobre Camber, que con la horquilla de 100 y la dirección muy de XC la estoy metiendo una paliza seria. Incluso oigo un par de golpes fuertes detrás que me hacen temer por el cambio trasero.
Este T1 acaba en una zona muy rápida en la que se puede apretar de verdad con unas curvas abiertas muy divertidas y pequeñas piedras en las que dar saltitos y que parezca que sabemos algo de esto jejeje
Miro para atrás y no veo a mis compis que como ya hicieron ayer las bajadas supongo se lo habrán tomado con más calma. Son las 09:30 y tengo que subir pedaleando al castillo e intentar llegar a tiempo para probar la otra especial, así que la subida la hago tirando bastante. Este enlace empieza por un tramo largo de carretera que nos lleva a un sendero impresionante que nos exprime las fuerzas hasta dejarnos a los pies de la muralla. Si el sendero es bonito, todavía lo es mucho más la ciudad por dentro, con empinadísimas calles adoquinadas en las que apenas entra la luz del sol. Es curiosa la cara de los sorprendidos turistas que empiezan a llegar y nos ven con semejantes pintas por medio del pueblo. Vaya palizón! Acabamos de empezar y ya estamos sudando de lo lindo.
Llego al castillo a las 10 menos cuarto, así que me tiro a la T2 sin pensarlo, ya que me había comentado Pistón que era mucho más rápida que la primera, pero tengo solo 15 minutos para bajar y volver a subir.
Esta vez no me subo a la torre y cojo directamente el desvío a la T2 en la zona de hierba y nada más empezar SOOOOOOOO!!! Madre que me mato!! Otro cortado que casi me como con las prisas... Menos mal que he podido probar primero porque en carrera me hubiera ido de cabeza seguro... Cojo la alternativa que da una vuelta considerable, pero es lo que hay por ser un cagón y llevar una bici de rally. Enlazamos la callejas de cemento con unas rampas de tierra muy divertidas en curva, un camino empedrado, un  rapidísimo curvón a izquierdas y más pasos complicados... Ya en la parte baja de la muralla hay un par de trampas divertidas que nos dejan en un camino muy rápido en falso llano que te pone las piernas bien calentitas.
Este tramo es mucho más rápido y menos técnico, con un sendero precioso a ratos realmente estrecho entre muros, vegetación y piedras. Entre muros hay un pequeño escalón que hay que saltar y usar una piedra como recepción, pero entro muy deprisa y me como el muro de delante. Me he puesto la bici de sombrero, pero no se ni como he hecho para no caerme yo. Desatasco el tractor de entre los muros y sigo con el sendero disfrutón que a veces se pone difícil entre tal ensalada de piedras.
Para acabar el T2 hay unos cientos de metros en llano que otra vez te ponen a 180 pulsaciones.
Si bien bajando el primer tramo había todavía bastante gente reconociéndolo, en este no había nadie... Habría tardado algo menos de 4 minutos en bajar y me quedaban a penas 10 para llegar al castillo en hora de escuchar el briefing.
La primera parte del remonte es un camino sin mucho desnivel pero un poco incómodo por las piedras, pero pronto cogemos la carretera que nos lleva a la entrada del pueblo. Esta vez hay que subir y subir y subir, pasando por la bonita Plaza Mayor con la estatua de Francisco Pizarro saludando a nuestra llegada. Desde la plaza al castillo una vez más subimos por las empedradas y empinadas callejuelas hasta la zona cero de la carrera. Llego un par de minutos pasadas las 10, así que objetivo conseguido. Me pongo a buscar a mis compañeros de viaje y les veo con cara de preocupación, ya que la patilla del cambio de la Zesty de Guijarro se había partido y no tenía solución. Valiente putada después del viaje y la ilusión puesta quedarse sin poder salir a carrera. Por suerte nuestros vecinos de furgoneta le prestan una patilla universal y la bici se queda perfecta. En esos momentos Javi estaba tan contento que ni se acordaba que se había dejado medio dedo en un muro hacía un rato.



Atendemos al briefing y pese a ser 80 participantes hay un ambiente muy bueno y se palpa el olor de la competición en cada esquina. Eso si, una cosa que me nos ha gustado mucho es el buen rollo que se respira en la modalidad. Yo que soy un charlas creo que acabé hablando con la mitad de la gente que estaba inscrita, con los que hacían fotos y los vecinos que estaban de espectadores.





Por fin va a empezar la prueba y Javi, Pistón y Dani que salían con dorsales de número bajo se suben a la zona de salida para esperar a que les toque. Yo me subo con ellos a cotillear un poco y para hacer unas fotos, que como llevo el dorsal 48 me queda un rato para que me toque.
20 segundos, 15, 5, 4, 3, 2 ,1 Salida!! Empiezan a tirarse los primeros corredores y se ven muy buenas maneras, esta gente sabe lo que hace. Me fijo en como trazan la primera curva, aunque se que la haré mucho más despacio.
El primero en salir de nosotros es Guijar y su Zesty tuneada, escalón, curva cerrada, bajadita, arco, contraperaltada a izquierdas rápida y se pierde por la callejuela. El siguiente con el número 13 sale Sergio con su Trek endureta, con el 14 mi amigo Roberto de Toledo Enduro y poco después sale Dani con la Intense a darlo todo.





Yo subo la bici por los andamios hasta la salida y tengo que dar las gracias a los chicos que estaban allí ayudando, porque casi me mato varias veces trepando por los andamios con las suelas de las zapatillas de rally que resbalan como demonios.
En esta primera bajada entro con miedo en la primera piedra y la cago, sigo y hago el resto hasta la salida de la muralla bastante bien, a excepción de los cortados que no estaba tirando. Ya en la parte más rápida veo que estoy cogiendo a Jesus y su Nomad que habían salido delante mía, pero la alegría me dura poco porque viene detrás Alex con la Spe Enduro como un avión y me pasa como poseído por un diablo... Madre como va este chico!!! Intento cogerle la rueda pero es imposible, en una zona de subida se atranca un poco y me acerco, pero giramos un muro y ya ha desaparecido porque lleva un flow impresionante. Un poco más adelante en un camino muy rápido me deja pasar Jesús, pero en cuanto se pone la cosa chunga se me vuelve a pegar al culo. En vez de ir mejor cada vez me siento más atrancado en las zonas técnicas y esto me pasaría durante toda la mañana.



Llegamos al fin del tramo y con la emoción tiro para delante. Hasta que me doy cuenta que se me ha olvidado que me pongan la pegatina con el tiempo... Joooder!!! Me toca darme la vuelta cuando ya casi había salido del pueblo. Esta vez el remonte lo hago solo y tirando para no llegar tarde, así que me meto un calentón guapo. En el control me dicen que no he hecho mal tiempo, 7:01 que me da para estar entre los 40 primeros. El resto de los chicos de Bike Griñón mucho mejor que yo andan entre el 20 y 30.

Llego arriba para prepararme para la T2 y al final me ha sobrado tiempo, aunque estos ya han salido. Comentamos las jugadas antes de salir y nos preparamos para la siguiente salida.
3, 2 , 1 YA! Ahora la primera curva me ha salido mejor, me concentro para acordarme de coger el desvío y no tirarme por el primer cortado. El inicio es una sucesión de rectas enlazadas con curvas en rampa muy divertidas que nos sacan con rapidez del  pueblo. Aprieto los dientes y veo a lo lejos a Jesús, pero empieza en tramo de piedras y él ahí me mete tiempo, así que en el peor momento para él me alcanza Alex, justo antes de un cortado de piedra en curva. Yo no lo hago y le hago perder algo de tiempo a él, pero como es un máquina se recupera y le pierdo de vista en un pis pas...
El final de tramo es rapidísimo y ahora si me paro a por mi pegatina con un tiempo de 3:45. El enlace lo hago con Alex y Jesús charlando tranquilamente hasta subir a lo alto del castillo otra vez. Y todavía nos quedan 2 tramos y sus correspondientes subiditas.

Al llegar arriba veo a Dani que me comenta que ha doblado el desviador delantero y ha reventado los rodamientos del buje de la rueda de delante. Por desgracia se acaba para él la carrera, ya que tenía mala solución in situ. En boxes veo a gente que me comenta incluso que se van a saltar algún tramo porque se les está haciendo muy duro y es que las bicis de descenso con doble pletina y casi 20 kilos se notan cuando hay que tirar de ellas para arriba.

No me voy a seguir enrollando con los tramos T3 y T4 por que son repetición de los dos primeros tanto en recorrido como en tiempos, ya que el T3 lo clavé por milésimas y en el T4 perdí 9 segundos y no se donde me los dejé... Supongo que con los huevos en casa, que cada vez bajé más cagón. Y hablando de genitales, de mis compis de viaje destacar el incidente de Guijarro en el T4 que un golpe le hizo estar parado casi 3 minutos en un lateral sujetándose sus partes más nobles.

Aunque había una última bajada opcional yo entre un tirón que me había dado subiendo de la T4 y que sentía que la pobre Camber se me estaba quejando preferí cambiarme y dejar las cosas como estaban. Menos mal, porque el lunes al salir con la bici tenía dos llantazos grandes y un radio muy flojo por el que estaba perdiendo aire. Además el amortiguador trasero también ha perdido mucho aire. Espero que no sea nada, que la última vez fueron casi 2 meses sin bici de garantía en garantía.

Podemos decir que a pesar de algunos pequeños incidentes normales en este tipo de carreras nuestra experiencia de estrenarnos en el enduro ha sido una pasada. Aunque el organizador tenía pocos medios, pusieron de ellos todo lo posible para que disfrutáramos montando en bici en un entorno impresionante, tanto la zona monumental de la ciudad como los tramos en el campo.

En cuanto a resultados el campeón del grupo fué Pistón con su puesto 21º, yo después con un 38º, Guijar el 49 y Dani el 67 habiendo hecho solo dos tramos. Mi amiguete Rober se metió un pedazo de 9º puesto. Y me tengo que acordar de mis compis de remonte haciendo Alex un pedazo de 3º final y Jesús un 47º.

Para acabar esta entrada y uniendo con el inicio de la misma, no puedo dejar de hablar de la bici que llevo usando ya más de un año y medio. Esta Specialized Camber de 29" desde luego que no se puede dudar que es ante todo polivalente. Ha aguantado du y tricross, marchas, maratones, muchos kilómetros de entrenos por pistas, rutas impresionantes por la sierra y hasta la hemos metido en una carrera enduro para terminar el año. En el triatlón el peso de más me hizo sudar la gota gorda en las subidas más empinadas, pero se portó como una campeona y en el enduro se ha llevado una paliza buena y la horquilla de 100 con esa geometría me tenían extresado en los peores tramos, pero lo importante es que lo hemos disfrutado en cada pedalada. Sería ideal el año que viene hacerse con una rígida para el XC y una bruta para enduros, pero de momento hay que tirar con lo que se tiene.

NOS VEMOS POR LOS CAMINOS!!!!  
Pablo Olea

PD muchas gracias a los fotógrafos del Ayto de Trujillo que han hecho las fotos buenas que he colgado ;)







lunes, 28 de octubre de 2013

RUTA IMPERIAL 2013 Memorial Alberto León




Como quien no quiere la cosa ya ha pasado un año de probablemente la marcha más bonita que hiciera el año pasado, así que estaba claro que la opción a tomar el domingo 27 de octubre era la de asistir a la 4ª Edición del Memorial Alberto León.
Las fuertes lluvias de los días anteriores a la prueba nos hicieron apurar al máximo el hacer las inscripciones, pero el domingo se preveía soleado y por suerte nos pudimos inscribir mi amigo Parra y yo el mismo jueves a la Ruta Imperial en su versión más larga, que serían unos 70km con un recorrido según la organización duro y técnico, solo apto para bikers bien preparados. A la marcha media de 45km se habían apuntado de BikeGriñón  Kini, Raúl, Guijar y Jorge que tomaba el relevo a Pistón que no está del todo recuperado.
Ya el domingo me levanto a las 6:00, que con el cambio de hora no se hace muy pesado y me acerco a Ciempozuelos a recoger a David y su bici.
Llegamos a El Escorial y aparcamos en frente del monasterio igual que el año pasado. Vamos un poco pegados de tiempo, así que recogemos los dorsales y volvemos para cambiarnos y preparar las bicis. Wassapeo a los chicos del club a ver si nos vemos antes de salir pero con  2200 ciclistas que nos habíamos juntado fue imposible hacernos la foto de rigor antes de la salida todos juntos.


Foto de Guijar que no se nos enfade :P




Cuando queremos colocarnos en la salida no solo está llena la zona de salida de la ruta larga, si no que ya está llena toda la calle hasta el final... Hay 2200 tíos que han llegado antes que nosotros, aunque pedimos permiso para meternos en un huequillo que vemos, aun así tendremos delante por los menos a 500 tíos de lo más variopinto. Este año me ha resultado curioso oír acentos de otros países y de de otras regiones de España y ver bicis desde las más sencillas de hipermercado hasta exclusivas máquinas de XC o de enduro, que se vieron unas cuantas.

Dan la salida y pasa un rato largo hasta que nos empezamos a mover torpemente entre tal marabunta que poco a poco se va estirando, dejamos el monasterio a la izquierda y llegamos a unos arcos que nos hacen parar casi del todo, giro a la derecha y empezamos con algo muy habitual en esta marcha: SUBIR!! Sin dejar de hacerlo cruzamos San Lorenzo de El Escorial y sus bonitas y empinadas urbanizaciones para poner rumbo a la carretera que nos llevará durante 10 kilómetros y 50 minutos a subir al Alto de Malagón. David y yo vamos adelantando poco a poco a mucha gente, no queremos machacarnos mucho en esta zona, pero hay que aprovechar para adelantar lo posible, ya que cuando empiecen las zonas técnicas a más gente alrededor más fácil es coger los odiosos atascos.

No sin mucho sudar llegamos a coronar , giramos a la izquierda para coger una pista que nos subirá a la parte más alta y durante 3 kilómetros prácticamente llanos disfrutamos de un hermoso paisaje con Madrid al fondo a la izquierda y el embalse de Peguerinos a la derecha. Aquí ya vamos mucho más estirados y los grupillos son de pocas bicis, que nos vendría de lujo ya que vemos el cartel de "descenso peligroso" jejeje esto es lo nuestro... David se pone delante con su 26" y horquilla normalucha, pero la técnica de la moto se nota y baja como pollo sin cabeza, así que vamos pasando poco a poco ya que el camino está lleno de piedras grandes sueltas y roderas que dejan poco espacio para buscar huecos.
Lo mejor de la bajada estaba por llegar... La organización había advertido que entre los kilómetros 13 y 18 estaban parte de las zonas más peligrosas y técnicas y lo íbamos a descubrir muy pronto. Dejando el pueblo de Robleondo atrás empezamos un sendero chulísimo de pequeñas subidas y bajadas con piedras que lo hacen muy divertidos. Desgraciadamente unas 6 bicis delante nuestra va un chico que la técnica se la dejó en casa y está haciendo un tapón grandísimo. A mi como no me gusta bajarme de la bici para nada les dejo un hueco para hacerlo yo despacio pero sin bajarme que te da mucha más satisfacción al final. Según se va abriendo el camino David consigue adelantar a los que llevaba delante y se me escapa unos metros. A la que me quito el tapón tengo unos metros de disfrute hasta que llegamos a la zona más delicada en la que el atasco de gente es mucho mayor, y es que el sendero se pone muy muy vertical y se hunde en una rodera de apenas 40cms de ancho por la que vamos bajando como podemos, pero sin bajarse de la bici eh! Bueno, David decide tomar una alternativa pero parece que le molesta a una zarza que estaba por allí y le abrazó de tal manera que todavía estamos pensando cómo no se cayó rodando hasta abajo...
Pasado el susto sigue semejante bajadón con el reguero girando a la izquierda y un atasco monumental en ese punto. David y yo tiramos por medio del campo fuera de la trazada y hay un chico parado mirando hacia abajo. Me acerco y veo que hay un cortado de piedra de unos 3 metros casi vertical y después sigue bajando aunque menos empinado, así que sin pensarlo me tiro para abajo y esta vez si que consigo adelantar a un montón de gente de una tacada, aunque por desgracia se acaba la bajada y llegamos a la carretera. David viene detrás y me coge rápidamente antes de dejar el pequeño tramo de carretera y entrar en un camino que durante unos 4km tiende a bajar y vamos comentando las jugadas de la bajada. Le voy a dar un trago al bidón y al ir a meterlo se me cae ya que vamos deprisa bajando... Así que me quedo sin líquido llevando solo 20km de carrera. No me preocupa demasiado ya que hace un día perfecto, con sol pero una temperatura muy agradable que haría todo más fácil, además que por experiencia en estas marchas los avituallamientos son muy completos y no debería tener muchos problemas. 
Llegamos a otro pequeño tramo de carretera del que salimos con una fuerte rampa al llegar a una urbanización. Un par de kilómetros divertidos bajando con rapidez entre pinares y nos encontramos con el siguiente tramo de ascenso largo, pero una vez más con semejante paisaje se hace mucho menos pesado el esfuerzo. David empieza a notar las piernas cargadas y bajamos un poco el ritmo. Una última rampa que se endurece poco a poco y al fondo vemos el segundo avituallamiento que sería sólido y líquido. Paramos lo justo para comernos un plátano, beber un par de vasos de agua y coger un gel para más tarde. Yo además cojo un bote de Aquarius que pongo en el portabidón y rezo para que aguante un poco por lo menos.
Después de esta parada nos toca subir todavía un poco más, pero una vez coronamos el alto tendremos nada menos que 10 rapidísimos kilómetros de pistas entre pinos que aprovechamos para disfrutar saltando de lado a lado del camino en cada bache o piedra que se nos pone por delante. En uno de los saltos casi se me cae al suelo el bote y decido meterlo en el bolsillo de detrás mejor. En esta zona se nos unen un par de chicos con maillot gris y uno con casco endurero que iríamos juntos ya casi todo lo que quedaba de camino. Y es que todavía nos quedaba casi la mitad!!!
Llegamos a Vademaqueda y tras una zona que parece realmente un pump track, se acaba la diversión. Me tomo el bote de Aquarius y dejamos a la izquierda el cortafuegos por el que nos metimos el año pasado. Este año estaba muy bien señalizado y no había dudas de por donde pasar. Así que como recordaba después de pasar un pequeño río empezamos a subir por un estrecho sendero que se convierte en una pared imposible. Toca bajarse de la bici en un par de puntos que con tanta piedra suelta es imposible hacer montado. En el segundo tramo complicado me empeño en hacerlo subido y consigo pasar un par de pasos complicados hasta que me tengo que bajar en un escalón muy grande.
El resto del camino hasta llegar a Robledo de Chavela es bastante llano a excepción de una divertida bajada justo antes de entrar al pueblo y un sendero corto pero muy técnico en el que hay varios escalones, algunos los subimos montados y en otros hay que echar pie a tierra. Ya en Robledo nos avisan de que tenemos el siguiente avituallamiento que como de nuevo estamos subiendo y subiendo parece que no llega nunca. El tramo de asfalto se agradece y ya vemos al fondo las carpas de Shimano y Nutrisport. Saludo a Fernando Ocaña que está con la moto guiando a la gente. Las chicas del avituallamiento nos ofrecen un caldito, pero cogemos unos plátanos y aprovecho a beber un par de vasos de isotónica, que sigo sin agua para beber entre avituallamientos. Esta vez no hay botes y tendré que aguantar hasta el siguiente...
En este punto nos unimos a la marcha media, así que hay mucha más gente para avituallarse que en los anteriores, pero de todos modos había de todo y eso que ya habrían pasado muchísimos de la ruta más asequible. Seguimos nuestra marcha David y yo, pero lejos de haber acabado nos quedan por delante otro par de regalitos. El primero nada más salir de Robledo una subida de algo más de 4 kilómetros que a esas alturas se le está haciendo muy dura ya a la gente. David va buscando un ritmo cómodo ya que está tocado, pero vemos a mucha gente que empieza a bajarse de la bici por cansancio e incluso con calambres. La última parte se pone más dura aún, pero acaba la subida y ya asoma a la derecha la vía del tren que nos llevaría hasta El Escorial. O no? Pues resulta que la segunda zona técnica que nos había comentado la organización está justo delante de nosotros. Mientras que la ruta de 45 gira a la derecha para ir paralela a la vía del tren, los de 70km seguimos rectos y tenemos que subir el pedazo de monte que tenemos delante de nuestras narices. Desde abajo vemos a algunos que ya lo están subiendo y da miedo solo de pensarlo. Como mi compañero de viaje viene un pelín detrás me paro y doy la vuelta a la bici para echar algo de cera a la cadena, ya que empezaba a quejarse. Cuando llega David me comenta que está fatal y decide darse la vuelta y tirar por la variante de 45km. 
Doy la vuelta a la bici, guardo la bomba que me había pedido un chico que iba un poco bajo de presión y me pongo con la subidita famosa. Como voy bien de fuerzas subo deprisa adelantando a varios bikers, incluso consigo librar un escalón que parecía dificil y no lo era tanto. En el seundo escalón un poco más arriba ya si que no lo veo claro y me bajo de la bici. Cuando me quiero dar cuenta estoy arriba y adelanto justo antes de empezar a bajar a los chicos de gris que se habían parado un segundo en un cruce. Junto con el chico del casco integral nos marcamos una bajada de las que hacen época. Pensándolo ahora me da hasta miedo ya que una caída hubiera sido gorda, pero en el momento empalmamos saltos, saltamos zanjas y piedras todo a tope y soltando frenos. La sonrisa de oreja a oreja se veía en mi cara y se intuía detrás de su barbuquejo. 
Una vez se acaba semejante bajadón llegamos a un cruce de la vía en el que nos volvemos a juntar con la otra marcha. Ruedo con los chicos de gris durante un buen rato a ritmo alegre y justo antes de entrar a Zarzalejo estaría el último avituallamiento líquido en el que ellos pararon. Yo decidí no parar pese a ir sin agua, pero ya quedaba poco para acabar.
Por las calles de Zarzalejo aprieto fuerte con todo el desarrollo hasta pasar el pueblo y desviarnos en un parque para coger el camino que llevará al monasterio. Este camino a ratos se estrecha y se pone algo más complicado con alguna piedra y escaloncillo, lo que hace que se forme algún tapón. Cuando llevo un kilómetro más o menos veo que está David delante mía adelantando por la piedras como tiene que ser. 
Ya juntos vamos al ritmo de la gente menos cuando aparecen piedras que nos engorilamos y vamos buscando pasos alternativos, sobre todo en el tramo de calzada que lo disfrutamos hasta el último metro. Aquí David haciendo gala de la experiencia me metió unos metros escogiendo el paso bueno :)
Giramos a la izquierda para entrar en una pasada de camino que nos lleva a la zona del campo de golf y ya cogeremos la carretera para afrontar el último kilómetro, que para acabar es una subida pegada al monasterio donde choco la mano con Guijar que está guardando los trastos. Esta cuesta ya termina de matar a David. Menos mal que justo antes de meta están esperando su mujer y sus hijos y le cambia el semblante al verlos. Nos paramos unos minutos y ya hasta la zona de meta iríamos andando. Yo me adelanto un poco para hacer una foto de finisher de David con su hijo Alex. Hemos acabado los 70km en 04:30 y han salido al final casi 2000mt de desnivel acumulado.


Ya en la zona de meta nos tomamos un par de vasos de isotónica y vamos a por nuestra bolsa de regalo y el ticket para la paella. Y que bien que sienta la paella cuando acabas un palizón de estos!!

Como le dije a Guillermo de Portugal en meta, este año se han superado consiguiendo una marcha si cabe mucho más bonita y conseguida, de las que vas continuamente pensando en qué bonito es el paisaje por el que estás yendo. Además los toques un poco más técnicos me han encantado y siempre es un reto intentar aguantar lo más posible sin poner el pie en el suelo. También el hecho de haberla hecho sin prisas me ha permitido disfrutar más de todo al no ir con la postura de "cabreado" apretando como un loco y pensando que cuando me va a dar el calambre. Que por cierto casi al final tuve un amago de calambre que supongo será por no beber suficiente.

David por su parte también ha acabado encantado pese a la paliza de una ruta tan larga, cuando el está acostumbrado a entrenar tiempos cortos y sobre todo hace dos semanas que está en reposo por una lesión entrenando para un duatlón.

El resto de los chicos de BikeGriñón nos contarán sus sensaciones en la crónica de la ruta media.

El siguiente reto nuestra primera carrera de enduro el 10 de noviembre en Trujillo. De momento nos vamos Guijar, Pistón y yo, pero seguro que alguno más caerá en la tentación...


MAS FOTOS CUANDO SALGAN LAS OFICIALES!!!

lunes, 22 de julio de 2013

MI PRIMER TRIATLÓN! TRICROSS DEL TAJO 2013

Hacía tiempo que venía comentando que me apetecía lo de hacer algún triatlón, pero teniendo en cuenta que hasta hace 2 meses no tenía ni unas zapatillas para correr, era como un propósito de los de principio de año que son poco realistas. Como el fumador compulsivo que dice que ese año lo dejará o el que decide dejar de jugar tanto al Call of Duty y se apuntará al gimnasio.
Pero el hecho de ver que el correr me estaba gustando, cosa que no me había pasado en 37 años, empecé a ver posible este propósito y pensé en empezar a correr algún ducross este verano, hacer algún tri en distancia sprint antes de acabar el año y para el año que viene poder hacer algún olímpico.
Hace un par de semanas como contaba en la anterior entrada al blog me estrené en un ducross y comentándolo con un vecino que ha hecho ya este año un par de carreras de las Ducross Series, me dijo que se habían apuntado a un triatlón cross en el que el sector de nadar se hacía en el río, con lo que sería un poco más llevadero. Pues después de cotillear un poco por la web del organizador me apunté sin pensarlo dos veces. Tenía un par de semanas para prepararme, sobre todo el tema de nadar que no he nadado nada de nada este año.

Pues las dos semanas de preparación habían pasado y en bici me sentía muy bien con pocos entrenos, pero bien aprovechados. Corriendo iba mejorando, pero el miércoles antes de la carrera no tuve mejor idea que la de salir a correr sin calcetines para acostumbrarme. Tenía que haberme enterado si se puede correr sin calcetines con esas zapatillas porque en solo 4 kilómetros se me hicieron dos rozaduras en los talones de las que dan miedo. La del pie derecho más que una rozadura era un socavón. Así que me tuve que pasar el resto de días en el trabajo cuidando de que mejoraran lo posible de cara al domingo.


En cuanto a la intención de nadar al menos 3 o 4 días cada semana, al final fue nadar un solo día 3 o 4 largos en la piscina de casa... Vaya tela!!!

El domingo había quedado con Angel y Pepelu en Griñón a las 08:00 de la mañana, así que por lo menos no hubo que madrugar mucho. Angel ya había cargado las 3 bicis el día anterior, así que echamos las bolsas con las cosas al maletero y salimos hacia Fuentidueña de Tajo que es donde se celebra la carrera.
En poco menos de una hora estamos allí; ya por la carretera de Valencia según nos vamos acercando vemos que casi todos los coches van cargados con bicis y empieza a notarse el ambiente de carrera.
Llegamos al pueblo y junto al polideportivo han habilitado una tierra recién segada como aparcamiento. Ya hay muchísimos coches aparcados y los que estamos entrando... Incluso se hacen pequeñas caravanas para entrar al aparcamiento. No llegamos muy tarde, pero nos toca dejar el coche ya casi al final del todo.
Cogemos las mochilas y las bicis y nos dirigimos al polideportivo donde está montada la zona de meta con todas las carpas junto a la piscina. Unos metros más adelante están los boxes en el campo de fútbol de césped artificial.


Recogemos la bolsa con los dorsales y el chip, además de otra con un par de regalos un poco cutres la verdad.
Coloco el dorsal en la bici y el otro en el portadorsal, nos ponemos el chip y nos dirigimos a colocar la bici en nuestro lugar del box. Coloco la bici, el casco, las zapatillas de bici, el portadorsal y los calcetines para hacerlo lo más rápido posible. No me queda más remedio que ponerme los calcetines en la T1 ya que si no las rozaduras las puedo tener fatal a la hora de correr.


Con todo preparado ya solo nos queda acercarnos a la línea de salida, que está a unos diez minutos del polideportivo andando. Así que cogemos el gorro y las gafas y nos metemos la pateadita por medio del pueblo hasta llegar a una especie de embarcadero de donde íbamos a salir. Por el camino nos empezamos a dar cuenta que la temperatura está subiendo minuto a minuto y con esos calores vamos a llegar bien calentitos. Cuando llegamos ya había bastante gente calentando tanto dentro como fuera del agua, nos dejan unas bolsas donde meter las chanclas que numeran para poner luego junto a la bici y se van preparando las distintas olas de salida. Salimos de 100 en 100 con intervalos de 2 minutos. Yo salía en la tercera oleada que es de los novatos. Me noto más nervioso de lo normal ya que no sabía como me iba a encontrar en el río. Al menos estamos entre árboles y charlamos un rato, que nos ayuda a relajarnos.
Puuuuuuu bocina y salen los primeros nadando como si les persiguiera una carpa asesina... Luego los siguientes y voy cogiendo sitio. En mi salida estoy bastante delante, entre los 10 primeros como en segunda fila. Suena la bocina y saltamos al agua... Hale!! De primeras un buen trago de agua del Tajo! Pues si que empiezo bien. Los primeros metros me los quiero tomar con calma, pero aún así veo que estoy entre los 5 primeros y me extraña mucho. Claro... la inexperiencia es lo que tiene. A los 100 metros estaba fundido, con problemas para respirar y sin estar cansado me sentía raro y sin poder nadar en condiciones. Empiezo a buscar opciones para recuperarme y veo que a braza voy un poco mejor, pero llega un momento que me tengo que poner a nadar de espaldas para poder descansar y respirar bien. Me pasa mucha gente, mucha... pero veo que no soy el único que anda así y llevo a mi alrededor a varios buscando la posición también. Parece que el nadar a braza me da aire y se me pasa un poco el agobio. Vamos a llegar a un puente que hay unos metros antes de tocar tierra y los primeros de la cuarta ola se empiezan a cogernos. Bueno, eso quiere decir que con ellos como mucho he perdido 2 minutos. En esta fase final parece que he cogido el sitio y vuelvo a nadar a crawl sin problemas hasta llegar a la salida del agua. Un voluntario de la organización desde la alfombra nos ayuda a salir del agua y corremos unos cientos de metros por una moqueta bajo la que hay mil piedras que se clavan en los pies desnudos. Se nota que ya han pasado muchos por allí, ya que se notan todas las piedras a la perfección. 12 minutos para esos 800 metros de natación. Posición 283 en este sector qué desastre!!
Giro a la izquierda, a la derecha y nos metemos en el campo de fútbol donde haremos la primera transición.
Me pongo el casco, el dorsal, los calcetines que entran bien ya que los pies se han secado con el calor que hace y las zapas de la bici.

Salimos del césped artificial y nos subimos a la bici. Por fin en casa!!! Esto es otra cosa, aunque en los primeros metros llevo las piernas frías y noto que tendré que calentar un poco antes de poder tirar a gusto.
Salimos del polideportivo y cogemos una primera parte que son varios kilómetros de carretera recta con continuos sube baja y un poco de viento de cara que se hace molesto. En esta zona voy adelantando bastante, pero la gente todavía aguanta y van en grupos que a veces hace difícil buscar el hueco para pasar. Giramos a la derecha por una urbanización y me adelanta un chico jovencito de Morenito como un avión con postura de triatleta total. Con los codos en el manillar y bien agachado. Intento seguirle pero va demasiado fuerte y no me quiero cebar sin necesidad.
Por fin entramos en un camino, que ya empezaba a pensar que así poco iba a poder aprovechar mi punto fuerte. Pero seguimos en un camino ancho y rápido, con alguna subida y bajada, pero nada parecido al perfil que había visto. Por suerte el camino empieza a ponerse duro y tenemos la primera subida de verdad, un repecho que hace bajarse de la bici a más de uno y en el que ahora si que aprovecho para ir adelantando. Además hacía unos kilómetros que me había juntado con el chico del 354 y a base de relevos íbamos adelantando muy deprisa incluso en las zonas más llanas. Un rato de tirar con todo el desarrollo y asoma el segundo de los repechos que estábamos esperando. Esta vez 354 se pone delante subiendo y tira, yo voy a mi cadencia que no me quiero atrancar y me coge unos metros que puedo recuperar poco a poco en la siguiente zona rápida. Evidentemente a cada repecho le sigue una rápida bajada por un camino ancho pero muy suelto y seco que hace que la bici haya que moverla con tiento.
Según mis cuentas todavía nos quedaba otra subida dura, en la que esta vez tiro a saco y empiezo el descenso sin miramientos. Esta parte la hice tan fuerte que llegando al polideportivo ya no llevaba a nadie detrás. Los últimos kilómetros los hago con más cadencia y soltando piernas pensando el la T2 a la que estaba a punto de llegar.
Entramos en asfalto para pasar el puente y entrar en el polideportivo para empezar el último sector. Acabo los 18km de bici en algo menos de 47 minutos y sin notarme muy cargadas las piernas.

 La transición la hago rápido y me pongo con los últimos 4,5km que teníamos que hacer corriendo. Ya en los primeros metros noto que las rozaduras se me han abierto y me duelen un poco, pero lo que me hace no poder apretar más son los femorales que los siento como si quisieran acalambrarse. Ya en el primer kilómetro me han pasado fácil 6 u 8 corredores, entre ellos 354 que me pregunta si voy bien, le doy las gracias y le digo que siga que yo a mi ritmo... la verdad que esta primera parte voy muy lento y el calor lo empiezo a notar de verdad. Aunque me había ido hidratando bien en la bici ahora me sentía con la boca seca y no había sombra para refugiarse. Sobre el kilómetro 2,5 tenemos un avituallamiento de agua que me da la vida. Desde ese momento cada vez voy un poco mejor. Dentro del pueblo giramos a la izquierda y tenemos una larga subida que nos lleva al castillo. Ya arriba, giramos 180º y todo para abajo. Además al ir entre casas estamos a la sombra, incluso un vecino está en la puerta de su casa mojándonos con la manguera lo que es una ayuda tremenda en ese momento. He subido el ritmo y en los últimos dos kilómetros solo me pasan un par de corredores.
Por fin llegamos al polideportivo, pasamos por debajo del puente y los talones me molestan bastante en los apoyos raros con el pie, pero ya entramos en la alfombra y los últimos 50 metros en sprint y una sonrisa de oreja a oreja para acabar en 01:24:36, que me da la posición 99 de 400 dorsales y el 48 en mi categoría (masculino de 30 a 39 años) 

Como siempre lo mejor de las carreras es cuando estás en meta hablando con la gente y disfrutando de lo que has hecho. Ya se olvidan los momentos de dolor, agobio o sufrimiento y solo quedan las ganas de que llegue la siguiente en la que poder mejorar y disfrutar aún más si cabe.

No puedo dejar de dar las gracias a Guille por todos los consejos y ánimos, además de dejarme el traje de Morenito y esas pedazo de gafas sin las que me hubiera sido todo más complicado. También a mi vecino Angel que fue el que me animó a hacer esta carrera y me llevó a Fuentidueña del Tajo con su cuñado Pepelu que también es un tío majísimo.
En esta foto los tres antes de volver a casa:


Nos vemos en la siguiente, sea lo que sea, ducross, tricross, marcha o carrera de XC!!!!

lunes, 1 de julio de 2013

III DUATLON CROSS ANCHUELO 2013

Hace algo más de año que mi amigo Guille Bogas me andaba diciendo que para las temporadas en las que tengo poco tiempo para entrenar con la bici me pusiera a correr un poco. Pues viendo que se acercaban las vacaciones de mi nena, hace poco más de un mes que me puse a salir a correr un día a la semana para hacer las cosas con tranquilidad y poco a poco como me decía Guille. Pero como la cabra tira al monte las últimas dos semanas he cambiado días de bici por salir a correr, ya que me estaba motivando ver la evolución. La semana pasada ojeando la zona de tri-du de FOROMTB vi que el día 30 de junio había en un pueblo cerca de Alcalá de Henares una prueba de duatlon cross que parecía interesante, con una zona de correr sin complicaciones pero un tramo de MTB que prometía senderos y dureza como me gusta a mí. Serán 5km corriendo, seguidos de 17km de bici y un final de 2,5km corriendo de nuevo.
Al final decidí apuntarme pese a llevar con el running poco más de un mes y con entrenamientos no muy largos y a mi ritmo, simplemente como reto y para probar si me gusta este deporte, ya que me gustaría hacer en unos meses algún triatlón, siempre para divertirme y sin ninguna pretensión que no sea la de superación.

Así que el domingo me presento en el polideportivo de Anchuelo a las 08:30 de la mañana, fácil de encontrar ya que tenía unas banderolas de Shimano en la entrada. Aparco con facilidad ya que había poco más de 20 coches en ese momento y me dirijo a recoger los dorsales y el chip de TimingLap. Nos dan la bolsa de regalos con una camiseta técnica muy chula y un par de revistas.
Vuelvo al coche a ir preparando la bici y empiezo a hablar con Tomás y Oscar, dos chicos de Torrejón de Ardoz que han aparcado a mi lado muy majos que llevan unos cuantos meses haciendo duatlones y carreras a pie sin parar. Este fin de semana solo correría Tomás en la que sería su último du antes del parón veraniego.


La verdad que la hora que estuve con ellos me sirvió para aprender unas cuantas cosas que luego aprovecharía en la carrera, sobre todo a la hora de correr que es lo que mejor lleva Tomás. Dejamos las bicis colocadas en el box con las zapatillas y el casco puestos de manera que cueste menos colocarlo en la transición y nos vamos a calentar un poco corriendo alrededor de la zona de salida.



Se acercan las 10:00 de la mañana y nos colocamos en la línea de salida siguiendo las instrucciones del juez. Yo me pongo en segunda línea justo detrás de Tomás esperando poder seguir un poco su ritmo, que por lo que me había dicho era mucho más rápido que lo que había probado yo en un par de entrenamientos. Además viendo el panorama que tenía alrededor con mucha gente con pinta de triatletas y de correr mucho no me daba muchas esperanzas. Yo no conocía a nadie, pero según lo que había oído había algún galgo de los que aprietan de verdad.
Suena el pistoletazo de salida y todo el mundo sale como pollo sin cabeza, codazos y empujoncillos incluidos, pero eso ya me lo esperaba. Hacemos los primeros metros corriendo por una especie de parque dentro del polideportivo, por un camino estrecho con mucha curva de 90 grados incómoda, pero pronto salimos a campo abierto por medio de un sembrado muy poco pisado e incómodo, por el que vamos con precaución de no torcernos un tobillo a los 500 metros de salir. Atravesamos una granja en la que un gallo nos saluda amablemente y ya si cogemos un camino en mejor estado que acaba en una estrecha carretera en la que tenemos el tramo más duro de la zona a pie, con un repecho corto pero que cuando haya menos fuerzas lo sufriremos seguro... Llevamos poco más de 1 kilómetro y yo he salido demasiado animado y poco a poco voy bajando a mi ritmo natural, lo que quiere decir que me está pasando gente todo el rato, pero prefiero no cebarme que no tengo ni idea de como voy a reaccionar después. Subimos al pueblo hasta llegar a la carretera principal y bajar de nuevo a la zona de salida para cubrir la primera vuelta de 2,5km del circuito a pie. Al paso por la salida miro el crono y he hecho la vuelta en poco más de 10 minutos, que es mucho más rápido de lo que había probado nunca. Esto me va pasando factura y junto con el calor me siento cada vez peor y me sigue pasando gente poco a poco, a Tomás hace kilómetros que le he perdido de vista y llegando al pueblo me alcanzan un par de chicos de Dani Moreno que había conocido en la salida y no puedo seguirlos tampoco. Me queda como un kilómetro para acabar este sector y me entran ganas hasta de no seguir de lo mal que me voy sintiendo y es que ya de buena mañana no me sentía yo muy fino.
Pero el pasar por debajo del arco y ver el box con las bicis me da una subida de moral que me hace pensar que en qué estaba yo pensando un minuto antes. Paso por el arco con 22 minutos clavados para estos primeros 5 kilómetros, 3 minutos más lento que Tomás y 5 de los primeros... Qué desastre! 
Corro a buscar mi bici y me pongo el casco y las zapatillas. Solo en esto los primero lo hacen 30 segundos más rápido que yo!! Anda que no me queda por aprender...



Nada más coger la bici ya noto que esto es otra cosa y me siento como en casa. No he salido del parquecillo y ya he podido recuperar al menos 5 posiciones usando los bordillos del parque como peralte. Siento si asusté a alguien pero me sentía como un lobo enjaulado que le habían quitado la cadena. Esta vez tras pasar la granja y llegar a la carretera nos dirigimos a mano derecha y empezamos un camino recto en  subida tendida pero que se hace larga y nos lleva a ir bajando desarrollo poco a poco. Aquí la 29" está como en casa y sigo progresando lo que me hace animarme cada vez más. En este punto adelanto a los chicos de Dani Moreno que que animan a que tire fuerte. Tras la subida el camino empieza a bajar y yo meto todo el desarrollo. Se acerca muy deprisa una curva cerrada a izquierdas y me pongo en la derecha para adelantar a un chico que iba por el interior y me avisa que tenga cuidado a la que entramos en la curva. Ya era tarde... no me había dado cuenta que entrábamos en un campo recién segado y con una capa de paja que cubre todo y es como entrar en hielo. Saco la pierna izquierda como con la moto de cross y voy como dos metros casi tocando con el puño izquierdo en el suelo. Sin saber ni cómo lo he hecho salvo la caída pero no el susto... Desde este punto este chico con su barba y yo pasaríamos varios kilómetros juntos haciendo labor de equipo que viene muy bien en un tramo tan pistero como el que estábamos haciendo en esos momentos.
Llegamos al pueblo y "barbas" (te llamaré así si no te molesta)  me comenta que tendremos que regular un poco que nos queda una subida muy dura y él la conoce. Al salir del pueblo un bonito tramo de sendero en el que nos unimos al chico de "Blanco" que sería compañero de ruta un buen rato también. Entre olivos hacemos una zona de bajada en la que hay que ir con cuidado y cogemos una pista ancha en ligera bajada en la que poder apretar. Pero al fondo ya asoma la temida subida que nos esperaba. Y lo curioso es que no es la típica subida en la que el camino que va haciendo eses, si no que es un camino casi recto completamente en el que el desnivel va subiendo poco a poco, así como se va deteriorando el firme, con lo que poco antes de coronar el trío del que voy tirando en ese momento vamos adelantando a mucha gente, que o se va peleando con la bici o directamente se han bajado para hacer la última parte haciendo empujabici. Giramos a la izquierda y tenemos unos cientos de metros en los que descansar hasta llegar a un paso con un pequeño escalón que nos lleva a un sendero de  bajada corto pero divertido. Aquí me pongo a rueda de Tomás, nada más acabar otra subida divertida en la que falla un cambio y le adelanto por la derecha. Se nota que en la bici no lo iba pasando bien, pero ya me lo había dicho antes de salir. Coronamos y otro tramo de pista que nos lleva junto a la antena y nos desviamos por lo que parece una cantera, con una pequeña bajada en la que me adelanta el chico de blanco que iba conmigo y adivinar... Pues si, otra subida, pero esta vez corta que lleva a un descenso divertido en el que aprieto y voy buscando el límite. La verdad que en ese tramo iba pensando mucho en la gente que monta menos en bici ya que había alguna curva contraperaltada que era fácil comerse un olivo, pero en realidad los corredores debemos saber donde está nuestro límite y cuando toca cortar y no arriesgar.
Cuando ya parecía que estaba todo hecho giramos a la derecha y vamos por un estrechísimo sendero paralelo a un bonito pinar. El sendero va cogiendo desnivel poco a poco y se hace cada vez más duro. Empiezo a subir piñones y tengo que bajar al plato pequeño porque la cosa se pone dura. Tanto que justo antes de dar la media vuelta para meternos en el pinar y bajar al pueblo me tengo que bajar de la bici. En este tramo paso al lado de un chico que acaba de romper la cadena y va empujando el pobre. Espero que llegara bien y pudiera terminar la prueba. Ahora si que era todo bajada y tiro fuerte oyendo una bici que viene pegada a mi y vamos juntos hasta llegar al pueblo. Este tramo casi endurero es el más bonito de toda la carrera, además en sombra que viene muy bien. Le comento al hombre que iba conmigo (hizo podium en su categoría creo) que me noto cargado y no se lo que voy a tardar en hacer el último tramo a pie. Entramos juntos a la transición y esta vez tardo mucho menos, casi como este hombre, pero en cuanto salimos a correr desaparece de mi vista de inmediato. El tramo de bici ha salido en 47minutos, lejos de los 39 del primero, pero en línea con lo que han hecho cerca del puesto 20. 
Me quedan 2,5km de correr y noto las piernas muy cargadas, sobre todo los femorales, pero decido ir a un ritmo cómodo, aunque sea casi andando... Me adelantan dos corredores con facilidad, pero poco a poco me voy sintiendo mejor y podo después del repecho de la carretera empiezo a poder trotar cómodamente, incluso elevando mi ritmo poco a poco sabiendo que ya me quedaba poco más de 1km. En el tramo pegado a la carretera veo que está entrando gente con la bici que me habían pasado en el primer tramo corriendo, así que me animo y aprieto un poco más entrando con cara de felicidad en 1hora 24minutos
No tengo ni idea de cómo he quedado, pero me alegra ver que hay poca gente en meta todavía. Aprovecho para reponer fuerzas con un par de piezas de fruta y algo de beber en el avituallamiento de meta.
Al par de minutos llegan Barbas, el chico de blanco y un rato después llega Tomás sufriendo los excesos de la noche anterior pero con cara de satisfacción también.
Al final puesto 36 en la general de casi 170 atletas y 18 en Master30 que es mi categoría. No tenía ninguna referencia pero no esperaba estar por delante de la mitad de la tabla, así que muy contento con el resultado.



Un par de fotos del podium de la general de chicos y chicas. En cuanto vayan saliendo fotos iré actualizando la entrada con ellas.




En definitiva me alegro un montón de haber elegido esta prueba como bautismo de fuego en esta especialidad tan bonita. Una carrera dura por el calor y una parte de bici exigente pero muy divertida y variada, desde pistas anchas y rápidas, hasta senderos estrechos y técnicos. A ver si para la próxima se anima algún amiguete a venir conmigo.




lunes, 13 de mayo de 2013

Ruta del Vino Tinto 2013 MTB4Estaciones

Este fin de semana hemos podido disfrutar y sufrir por segundo año consecutivo de la maravillosa zona de San Martín de Valdeiglesias en la edición 2013 de La Ruta de los Vinos. Esta marcha forma parte de las 5 pruebas que este año ha preparado Last Lap en su MTB 4 Estaciones.
Por suerte este año lo he empezado muy fuerte en el tema laboral, pero esto me ha llevado a tener muy poco tiempo para montar en bici. Por un lado me he perdido las dos primeras pruebas de las 4 estaciones, la de Valdemorillo, que era una espinita que tenía ya que fue la única que no pude hacer el año pasado y la de Moralzarzal que es una zona que me encanta también y me apetecía mucho.
Pero La Ruta de los Vinos no nos la íbamos a perder! Para mi es muy especial porque el año pasado fue mi primera experiencia en una marcha de este tipo y además siento que esto es recíproco de algún modo, ya que además de las rutas en sí, estos dos años he tenido la suerte de cara y he salido bien parado en los concursos promovidos por el organizador y sus patrocinadores. El año pasado tuve la suerte de disfrutar de la previa que fue toda una experiencia y este año mi foto ha sido la ganadora del concurso y nos vamos de viaje este verano a hacer Pedals del Foc. Ya haré una intensa crónica cuando la hagamos :)

Este año no sabía muy bien a qué atenerme en cuanto a como estaba de físico, ya que aunque he tenido mucho menos tiempo para entrenar, entre los consejos del máquina de mi amigo Guille Bogas y lo que he ido aprendiendo este último año, me daba la sensación que estaba aprovechando bien este tiempo. Desde diciembre a marzo a penas salía una vez por semana y en marzo y abril he podido entrenar algo más, pero solo un día a la semana decente y como mucho un par de días más saliendo 1 hora y poco. El lunes antes de la prueba hice una salida dura y me encontré bastante bien, así que empecé a pensar en que podía mejorar o igualar por lo menos el resultado del año pasado.

El domingo toca madrugar.... Uff el sábado entré al trabajo a las 10 de la mañana y acabé más tarde de las 22:30, así que me cuesta levantarme cosa fina. El sábado he intentado beber mucha agua, ya que daban calorcito para la ruta y además me meto entre pecho y espalda una buena fuente de macarrones para comer y para cenar que hay que intentar controlar los calambres.
Había quedado con Antonio en su casa a las 06:45, cargamos y nos acercamos a Brunete a por Dani que viene con nosotros. Con los chicos de Bike Griñón había quedado en vernos en San Martín.
En el coche me doy cuenta que me he dejado el móvil en casa, así que me parece que esta vez no habrá fotos ni Strava para grabar la ruta.

Llegamos pronto con lo que aparcamos sin problemas, nos cambiamos en el coche y subimos en la bici al polideportivo donde se recogen los dorsales y la bolsa de corredor (mola la camiseta ;) ) Allí están Raulillo, Jorge, Victor, Guijar, Raul y demás de Bike Griñón. Aunque el castillo es un sitio precioso hay que reconocer que el uso del polideportivo para esto es un acierto, ya que había mucho sitio y con todas las mesas que había se hizo muy rápido el trámite. Curioso el PhotoCall que se puso allí para hacer fotos a los grupos de bikers.



Ya con el dorsal en la bici y cerca de las 8:50 les comento a todos que voy a bajar a coger sitio, que me gusta salir en la parte de delante para evitar atascos, así que me dirijo al arco de salida. Doy un par de vueltas para ir calentando las piernas y cuando veo que la gente empieza a colocarse me pongo en primera línea, exactamente en el mismo sitio que el año pasado. Este año echo de menos a Félix y Carcoma del club de Sevilla la Nueva, pero seguro que nos veremos pronto. El que si se pone a mi lado como el año pasado es Luis Ocaña, que dice que este año está flojo porque ha podido entrenar poco. Pero vamos, que a su nivel por flojo que esté irá como un tiro.



Miro a ver si veo a Raul y Jorge que pensaba que se pondrían delante también, pero no les veo. Dan las 09:30 y cortan la cinta. Nos piden que vayamos despacio por el pueblo, pongo el crono en marcha, suben las pulsaciones y por fin salimos!!
Cuando vamos a llegar a la primera glorieta resulta que se meten de un lateral unos 40 bikers delante de nosotros. Joder! Uno no está 40 minutos esperando en la línea solo para la foto. Me da mucha rabia, ya que  encima la mayoría van realmente lentos y los que podemos intentamos ir adelantando como podemos.
Uno de los cambios de este año en el trazado ha sido en la primera parte, supongo que intentando que la carrera se estire lo más posible antes de llegar al cruce de Pelayos y evitar atascos. Creo que habrá funcionado porque yo con la barbaridad de gente que tenía delante en la salida poco a poco iban desapareciendo, ya porque tiraban más o porque se iban quedando. Hay más tramo de asfalto al principio y cuando llegamos a las primeras zonas más técnicas con curvas y regueros la cosa está bastante limpia. Tiro para adelantar, pero sin cebarme demasiado, sobre todo cuando veo que ya voy en un grupo pequeño de gente.



Pasamos por debajo de la carretera y a la salida del túnel nos manchamos un poquito, pero vamos, que esto es MTB no. Empieza lo bueno y los pinares de ese lado de la carretera nos saludan con unos preciosos senderos que nos llevan a la primera prueba de fuego. La subida a la casa que poco a poco va cogiendo desnivel y hace que mucha gente eche pie a tierra. Aquí adelanto a dos relajados que han salido fuerte, les saludo pero como esta vez llevo el maillot de Bikegriñón me miran como diciendo que quién es ese loco?? Un poco más arriba está el cruce que nos lleva al tramo en subida asfaltado, donde me encuentro a otro relajado que va un poco más adelantado. Este tramo de nuevo como lo conozco lo hago sin forzar mucho, ya que recuerdo que una vez acabado el asfalto viene una de las subidas más largas de la ruta. Justo, giro cerrado a la iquierda y a subir otra vez por tierra. Esta zona tiene una par de subidas que te ponen en tu sitio, ya que se empinan bastante y hay bastantes piedras y raices. A la 29 le encanta esta zona!
Una rápida bajada en la que hacer echar humo a los frenos, otro tramo de subida fuerte y empieza la bajada muy rápida que hacer que pasen los km en un pis pas. Acabamos este tramo súper rápido y giramos a la derecha para meternos en un precioso sendero en el que no hay que pasarse de rosca, ya que es rápido pero el suelo es pesado y pica hacia arriba ligeramente. Una bajada con piedras nos deja en el avituallamiento, creo que el segundo líquido y primero con sólido. Cojo un par de geles que me dan los chicos y paso sin parar, ya que voy bien de líquido.
Nos metemos en la zona más fea de esta parte, que es la del cortafuegos pegado a la valla. Ya el año pasado se me hizo pesada, pero sabía que después venía un tramo precioso. Infinidad de senderos y tenemos los primeros descensos entre vegetación por senderos estrechos, con raíces y piedras y algún salto pequeño. El final de este tramo nos deja en la glorieta del pueblo, pero pasamos por debajo de la carretera por el mismo túnel del año pasado que hay que hacer a pie, ya que la entrada y la salida son muy empinadas. Al salir del paso de la carretera me doy cuenta que llevo la pierna derecha bastante cargada, y me sorprende porque no me parece haber tirado demasiado y he controlado las pulsaciones. Se da un pequeño rodeo antes de llegar al pueblo y no me gustan las sensaciones que llevo, incluso pienso en parar y no seguir el resto de ruta. Paso por el avituallamiento del polideportivo en el km 34 con 01:40, con lo que realmente si que he apretado más de la cuenta y por eso voy cargadito... uff con lo que me queda todavía.

En el avituallamiento paro un segundo a coger algo de fruta, una barrita y beber un poco. La verdad es que la experiencia del año pasado me ha ayudado mucho y el conocer el terreno igual. Desde el pueblo a la bajada sabía que había una buena subida, primero asfaltada y luego ya por tierra. Aquí si que empiezo a regular e ir más despacio de lo que me parece que puedo. Pero el esfuerzo merece la pena porque empieza la zona que baja al pantano que es una pasada. Senderos interminables con unos descensos preciosos en los que hay que estar con todos los sentidos alerta, ya que se puede bajar muy rápido aprovechando las roderas de las motos. Este año sin calambres los he disfrutado más si cabe, aunque iba con la rueda delantera un pelo más hinchada de la cuenta y tenía que tener cuidado en apoyos fuertes ya que no me daba confianza 100%
El descenso nos deja a nivel del pantano que bordeamos por el mismo sendero que el año pasado. Un paisaje que hace que merezca la pena el dinero de la inscripción, el esfuerzo, el sudor y los calambres. Y hablando de sudor... Al poco de dejar el pantano tenemos la parte más dura de toda la ruta. el sendero empieza a empinarse poco a poco hasta que es imposible seguir montado y hay que bajarse para continuar. Una subida tan empinada que cuesta incluso subir con la bici arrastras, el sudor de la frente se me fue a los ojos y el picor no me dejaba abrirlos, así que me pasé toda la subida casi a ciegas.
En este tramo subía con alguno de los chicos del club de allí y entre ellos con Mario, con el que fui el año pasado también casi toda la ruta. Las piernas cargadas empiezan a palpitar y me viene los primeros calambres claros, pero esta vez tengo claro que si me paro será peor, así que sigo sin dejar de dar pedales e intentando ir más suave.
Otra zona de bajada muy chula donde tengo un susto por la rueda delantera y que sujeto no se cómo. El último avituallamiento me viene genial ya que me había quedado sin líquido. Lleno el bidón y cojo una barrita de cereales que me dan fuerzas para seguir.
 El problema es que el tramo final es subir y subir, con zonas que me obligan incluso con todos los piñones a apretar y hace que me vuelvan los latigazos.
Por suerte los voy controlando yendo más tranquilo y cuando me quiero dar cuenta ya estoy entrando en el pueblo.
Para el crono en 03:00:07 para los 54km, que es la meta que tenía (3 horas), así que muy contento ya que pese al poco entrenamiento he mejorado 19 minutos con respecto al año pasado, si bien es cierto que han salido 2 kilómetros menos.
Al poco de llegar aparece Guijar como el primero de los de Griñón que han hecho la corta y poco a poco los demás, incluidos Jorge y Raul que habían hecho la larga también.
Antonio y dani con los que había venido decidieron estando apuntados a la larga en quedarse en el primer bucle ya que no se veían con fuerzas para hacerla entera.

Y como colofón al día la organización nos cambiaba una esquina del dorsal por un pedazo de plato de paella que estaba buenísima. Lavadero para las bicis, masajes para los que querían, y líquido para recuperar nos esperaban en meta.



En conclusión una pasada de día como siempre, ya que esta ruta está claro que no defrauda. Nos veremos el año que viene!!